sábado, diciembre 06, 2008

Y oficialmente más de un año sin postear y sin mucho qué decir.

Hace unos meses mi buen amigo Mauricio hacía evidente que llevaría un año sin postear. Hoy ya no hay de qué preocuparse, no sólo mi daimon, sino que mi blog mismo han muerto. En un falso intento de resucitarlo escribo esto. Realmente no tengo mucho qué escribir. Me alegra volver a hacerlo. Me encantaría decir que lo voy  a reintentar, pero no sé si sea así, realmente no lo sé. Y es que no tengo idea de qué escribir. Perdí el humor de seguir haciendo fotomontajes. (Eso y ya no le robo las ideas a mis amigos, pues ya paso mucho menos tiempo con ellos). Todos estos sucesos han tenido como consecuencia la muerte paulatina de este blog que desde el principio se anunciaba como agonizante.
Lo que puedo decir es que el post de hace un año hacía referencia al incremento exponencial de la violencia producida por el narcotráfico y a las contribuciones indirectas del presidente. Hoy la cosa no ha cambiado, en lo absoluto. El extranjero común y corriente ve de éste país un Narco-Estado. Equivocado o no, el post que escribía hace un año me parecía bastante gracioso, por estúpido y exagerado. Hoy ya no puedo decir que es exagerado, y con eso, sólo espero que siga siendo estúpido.